Todo por ella 7, 8 y 9

Por: Yuki38 Clasificación: Mayores de 16

Yuki nos trae otros capitulos mas de esta emocionante historia que solo con leer un poco de ella, te enganchas, asi que si no la sigues aun, te invito a hacerlo.



CAPITULO 7

Kame la había llevado hasta una casa en la playa perteneciente a sus padres. No pensó en otro lugar mejor para que ella se calmara.

-Disculpa si te he traído hasta aquí –comenzó a decir cuando habría la puerta y la dejaba pasar- creo que necesitas estar tranquila. No te preocupes no te preguntare que paso, debes haber tenido tus razones para salir de allí…

-Siento causarte problemas –dijo ella mientras se sentaba y aferraba su bolso, lo único que alcanzo a sacar- lamentablemente tuve una discusión y todo fue por esa foto que nos tomaron.

De pronto el celular comenzó a sonar y ella lo saco para contestar, era su compañero

-Siento lo ocurrido, sí estoy bien y gracias por cubrirme mañana estaré allí a primera hora.

-Si deseas puedes salir a la terraza, mientras veré que hay en el refrigerador

La chica obedeció y salió por un gran ventanal encontrándose con un hermoso paisaje, el mar y una hermosa puesta de sol. Tomo aire y trato de relajarse pensando en lo que había sucedido. Mientras kame entraba al living con una bandeja de frutas cuando escucho la alarma del celular de Rayen anunciando un mensaje. Lo tomo y lo abrió

“Por favor, tenemos que hablar
Se que me equivoque
Disculpa
Tomo”

Después de leerlo lo borro y dejo el celular en donde estaba saliendo en busca de la chica

-Rayen encontré un poco de fruta. ¿Quieres acompañarme? –ella acepto la invitación y se sentó junto a él cerca de la mesita de centro.

-Si deseas puedo hablar con Yamashita –ofreció él

-Gracias, pero es un problema que debemos solucionar ambos y por cierto ya debo irme

-¿Por qué no te quedas?...no te preocupes no te molestare, pienso que si te encuentras con él quizás las cosas no se solucionen, conociendo a Yamashita, el asunto aun esta fresco y él es muy fácil de enfurecer.

-Quizás tengas razón, mañana estaremos mas calmados y podremos conversar.

Aquella noche Rayen se colocaba una amplia camisa que Kame le había entregado para dormir, y se tendió en la cama tomando su celular con unas ganas grandes de llamarlo, pero se contuvo, el error no era de ella y debían conversar en persona.

Kame en su habitación no podía dormir, se encontraba inquieto con la presencia de la chica. Decidió ir hasta la habitación de ella y allí en frente de la puerta se encontraba cerro sus ojos y la abrió. La luz de la luna daba justo en la cama y dejaba verla allí tendida apenas tapada por la sabana, dejando ver sus hermosas y largas piernas mientras ella dormía pacíficamente. El joven se acerco y se arrodillo al lado de la cama para observarla, se veía tan deseable no soporto la tentación y su mano comenzó a recorrer una de sus piernas desde el tobillo hasta su pequeño calzoncito que se dejaba ver. Ante el contacto la chica comenzó a gemir con sensualidad y Kame se decidió a seguir aquel paseo erótico con su mano llegando a acariciar con suaves movimientos el sexo de Rayen.

-Tomohisa –aquel nombre pronunciado con sensualidad por los labios de ella, lo hicieron parar en seco dándose cuenta que ella en sueños pensaba que era Yamashita quien la acariciaba.

-Por lo visto lo amas de verdad –concluyo finalmente y levantándose tomo la sabana y la cubrió.

-Perdóname pequeña me equivoque contigo –le dijo acariciando suavemente el rostro de ella y salió de la habitación. En ese momento Rayen abrió sus ojos

-Gracias Kame –murmuraron sus labios y siguió durmiendo.

Aquella mañana muy temprano Rayen llego hasta su departamento acompañada del joven en un taxi. Un poco mas allá en el estacionamiento Yamapi observaba todo a través del espejo retrovisor de su auto, sintió rabia y mas aun un dolor fuerte en su pecho al verla bajar del taxi acompañada de Kame, pero sabía que tenía que dejar atrás sus celos y debía conversar con ella, porque si no la perdería.

-Gracias por traerme –se despidió del joven con una sonrisa

-Espero verte nuevamente

-Si el destino así lo quiere –volvió a sonreír y vio como el taxi se alejaba. Cuando se encamino hasta su departamento vio salir de su auto a Yamapi y al ver su rostro comprendió que el había pasado la noche allí, le dolió mucho verlo así, pero a la vez se sintió feliz de que él la buscara.

-Hola –le saludo con un tono de amargura
-Hola Tomo – saludo con unas ganas enormes de abrazarlo- ¿quieres subir?
-Sí, tenemos que hablar –dijo finalmente y le acompaño a su departamento.
-Me voy a cambiar –dijo ella mientras entraba en su cuarto seguida por él. Yamapi se sentó en la cama mientras la observaba, que ganas de preguntar si había pasado la noche con Kame, si había dormido con él. Movió su cabeza en forma negativa sacando aquellos pensamientos de ella. Cuando Rayen término se sentó junto a él.
-Lo siento, pero llegare tarde a mi trabajo y no quiero que me despidan… ¿puedes pasarme a buscar por la tarde? –ella pensó que el iba a objetar, pero calmadamente le contesto.
-No te preocupes te llevo además hoy en la mañana comienzo con las fotos promocionales del nuevo dorama y es en tu revista. En la tarde te estaré esperando.

Le acaricio el rostro y se levanto saliendo del departamento seguido por ella. Cuando llegaron se encontraron con Koji y Yamapi tragándose su orgullo le pidió disculpas bajando su cabeza delante de él lo que sorprendió a la chica.

-Nos vemos después –se despidió y subió al ascensor.
-¿Qué le ha pasado?, por lo que se él no es así –comento el chico

-Pues si es así, me siento orgullosa de él –dijo ella mientras caminaba hasta el estudio. Después de ordenar su agenda decidió ir hasta el estudio en donde se encontraba Yamapi para las fotos. Abrió la puerta con cuidado y entro sin que se percataran de su presencia. Allí estaba él con su postura seria posando para la cámara, pero no estaba solo había una chica que le acompañaba en la sesión. De seguro era la otra protagonista, pero esta se le acercaba demasiado en las fotos e incluso le sonreía y le buscaba en las poses. Rayen sintió como su corazón se apretaba y sintió celos de ver a aquella mujer al lado de Tomohisa.

-¿Qué les parece si se acercan mas románticamente? –sugirió el fotógrafo
-Lo encuentro perfecto –dijo la chica- será como para darle mas énfasis a nuestros personajes. ¿No lo crees Yamashita?
-¿Yamashita? –murmuraron los labios de Rayen- y esta que se cree con esa confianza –apretó los puños esperando lo que vendría después.
-No lo creo así, aun no hay necesidad de acercar tanto a los personajes –dijo él separando con suavidad a la chica de su lado.

Rayen sonrió desde donde estaba, pensando definitivamente que ese chico tendría una nueva oportunidad. Salió del estudio encontrándose con Koji en el pasillo.

-Te estaba buscando, tenemos que salir a terreno
-Ok, pero antes me podrías decir, ¿quien es la chica con quien le tocaba la sesión de fotografía a Yamapi?
-Ha, ya la conociste, bueno ella es Keiko Kitagawa, es la coprotagonista de Yamapi y también fue su chica por un tiempo.
-Ya entiendo –ahora comprendía porque la confianza de ella.

Aquella tarde apenas termino su trabajo salió del edificio y se encontró con Yamapi que a diferencia de la mañana, se veía más refrescado y extremadamente guapo con sus pantalones, polera y poleron a tono.

-¿No tienes frio? –fue lo primero que se le ocurrió preguntar, él sonrió y la miro
-No, no tengo frio…al estar contigo –le tomo la mano y camino junto a ella. Llegaron hasta un parque no muy habitado ya que la noche caía y las nubes en el cielo anunciaban que llovería. Se sentaron en un banco y fue Yamapi quien hablo
-Quería pedirte disculpas por lo que sucedió –lo había dicho, él que nunca pedía disculpas y que siempre decía que en una relación aunque la chica tuviera la razón nunca lo haría, dejaba su orgullo por completo atrás y lo hacía
-No es necesario que lo hagas…hoy he comprendido tus celos y reconozco que duelen
-A que te refieres –pregunto él
-He visto tu sesión de fotos -confeso ella- y me entere que ella fue tu novia
- Novia no, sólo fue alguien que quedo en el pasado –le sonrió al ver como ella le comprendía –Por lo de Kame…
-Kamenashi es solo un amigo- le interrumpió – y si lo que te preocupa es si pase la noche con el…sí estuve en su casa pero entre nosotros no paso nada.
-No te voy a negar que me siento aliviado, pero me gustaría que comprendieras…que entendieras…-comenzó a llover en ese momento, ella se levanto pero él la detuvo levantándose también mientras la lluvia seguía cayendo.
-Por favor…-la abrazo- quiero que sepas que te siento demasiado mía –susurro a su oído.

Ella lo separo un poco

-Y yo me siento demasiado tuya Tomohisa –ahora era ella quien se sorprendía de sus palabras, pero en el fondo de su corazón sentía un poco de pena ya que él no le había dicho que la amaba. Fue ella quien lo beso esta vez, acariciando sus labios con los suyos, mientras las gotas de lluvia caían por sus rostros. Siguieron besándose hasta que el celular de Yamapi sonó.
-Sí, Massu…sí no te preocupes lo recuerdo y estaremos allá –corto
-¿Dónde estaremos? –pregunto ella, mientras aceptaba la mano de él y caminaban saliendo del parque.
- Hoy es el cumpleaños de Tegoshi y lo celebraremos en un pub del centro
-Pero estoy toda empapada…y no llegare a tiempo a mi departamento para cambiarme y dices que es en un pub. ¿Hay que ir formal o no?
-Esta vez es formal, una loca ocurrencia de la madre de Tegoshi. Bueno es su único hijo –sonrió él- arrendaron el local por esta noche.
-Pero yo no puedo ir así –se urgió al ver el problema y mas al ver como Yamapi sonreía y seguía caminando como si nada bajo la lluvia llegando hasta el centro en donde el comercio aun estaba abierto.
-Ven –la guio hasta una tienda exclusiva
-Pero…estamos mojados –le urgió tratando de detenerlo, pero la fuerza de el no era competencia para ella. Cuando entraron una de las vendedoras se acerco a ellos.
-Lo siento pero no pueden…-súbito silencio al ver como el joven se sacudía el cabello y lo echaba para atrás con su mano- Yamashita-san adelante por favor –invito al reconocerlo, Rayen asombrada le miraba mientras el sólo le sonreía.
-Esta es una ventaja de ser famoso –volvió a sonreír, con una amplia sonrisa lo que hiso que el corazón de la chica latiera con fuerzas.
-Por favor quisiera que le buscara un vestido de noche a la señorita yo veré algo para mi mientras.
-Como no señor –se esmero en contestar la empleada y se llevo a Rayen hasta la sección de mujeres llamando a la vez a dos chicas para que la ayudaran.

Rayen se probo varios vestidos hasta encontrar uno que le agradara

-Le queda perfecto, incluso acentúa su figura – la vendedora la dio vuelta y la joven pensó que se encontraba en un sueño al verse. El vestido de un color rojo intenso realmente acentuaba su delgada figura, el leve escote acentuaba sus senos pero no los exageraba y el escote en la espalda solo quedaba para la imaginación de quien la viera.
-El largo es perfecto y combina con los zapatos –finalizo la vendedora luego llamo a una de las chicas que trayendo un cepillo le pidió a la joven que se sentara y en unos minutos le hizo un peinado tomando su cabellera.

Yamapi había escogido un ambo de un negro brillante con una corbata y una camisa a juego y ya vestido se dirigió en busca de Rayen. La empleada que los había atendido orgullosa de su trabajo le hiso esperar unos segundos y viendo que la chica estaba lista corrió la cortina del probador dejando ver a Rayen.

-Estas…hermosa –fueron las palabras del joven al verla con el vestido rojo, se acerco a ella y la tomo de la mano para contemplarla. Consiente del momento la empleada y sus ayudantes se retiraron.
-Preparare la cuenta Yamashita-san.
-Déjame ayudarte con los gastos –Yamapi coloco suavemente sus dedos sobre los labios de la chica para silenciarla.
-Es un regalo tanto para ti como para mi, es un gusto que no me daba en años –le dijo sonriendo y acercándola a él para besarla aprovechando que se encontraban solos en el lugar. Rayen sintió las manos tibias de Yamapi mientras recorrían su espalda haciéndola gemir ante el contacto.
-Si no fuera ya tarde…-murmuro haciendo que ella se sonrojara ante el comentario- algo falta- saco un abrigo largo de color negro y lo puso sobre los hombros de ella- así estas mejor.

Salieron de la tienda después de cancelar y pedir un taxi que los llevo hasta un exclusivo pub de la ciudad.


CAPITULO 8

Cuando Rayen entro al local junto a Yamapi quedo deslumbrada por el colorido, la amplitud del lugar y por supuesto la cantidad de personas que se encontraban dentro, todos elegantemente vestidos de acuerdo a la ocasión.

-Mira allí están los chicos –anuncio el joven llevándola hasta una de las mesas en donde el resto del grupo conversaba. Yamapi se acerco a Tegoshi y lo saludo entregándole un pequeño presente que traía en uno de sus bolsillos.
-Lo siento por no traer nada –se disculpo Rayen
-Estas tú y ese es el mejor regalo –le alago el joven
-Gracias –se acerco a él y le dio un beso en la mejilla- feliz cumpleaños.
-Nos alegramos que hayan conversado –les dijo Koyama sonriendo.
-Creo que tus padres te buscan –le dijo Massu a Tego al ver como una pareja se les acercaba. Yamapi bajo su cabeza para saludarlos y la señora aprovecho para preguntar
-¿Y tu madre Yamashita-chan?
-Me pidió que diera una disculpa por ella, pero lamentablemente tuvo que acompañar a mi abuela.
-Entiendo, la echare de menos, pero mañana la llamare –la señora miro a Rayen -¿y esta jovencita es…?
- Mi nombre es Rayen Sepúlveda, y soy fotógrafa para una de las revistas de la agencia Johnny’s -se presento bajando su cabeza con respeto.
-Encantada de conocerte- le contesto con una sonrisa y después de un rato les dejaron solos para que compartieran. Sentaron a la chica en medio y le contaban de sus proyectos y de la gira que se les aproximaba, realmente estaban a gusto con ella siempre prudente y sonriendo ante sus comentarios siendo en ese momento la envidia de algunas chicas que se encontraban allí.
-¿Te traigo una copa de champaña? - ofreció Yamapi
-Te lo agradecería – sonrió viendo como se marchaba hasta el bar.
-Te vemos feliz Rayen –comento Shige a lo que todos asintieron
-Sólo te pedimos que le tengas un poco de paciencia –sugería Ryo –es un buen chico, creo el mejor de todos nosotros.
-¡Oye ¡–exclamo Shige- ¿qué va ha pensar de nosotros?

Todos rieron y cuando Yamapi llego se sentó a su lado

-Esta exquisita –dijo saboreando la champaña

La música comenzó y Tego se alejo para recibir los saludos de algunos de sus compañeros que llegaban entre ellos Jin con Kame que a pesar de sus diferencias no olvidaba que ante todo eran compañeros, pero alguien mas venía con ellos. Rayen reconoció a la chica de la sesión de fotos que amorosamente se tomaba del brazo del acompañante de Kame.

-Yamapi –Jin le llamo acercándose a ellos para saludarle – ¿amigo cómo has estado?… Oye te veo bien acompañado no la vas a presentar
-Ella es Rayen – la presento y vio como Jin seductoramente le saludaba
-Hola preciosa soy Jin Akanishi –se le acerco, pero Yamapi se interpuso discretamente tomándolo por los hombros
-Ella es alguien especial – murmuro
-Entiendo amigo, veo que marcas tu territorio –sonrió- bueno yo también vengo acompañado, ustedes ya la conocen –acerco a la chica que venía tras suyo.
-¿Cómo han estado chicos? – saludo sin siquiera mirar a Rayen cosa que no paso desapercibida para ella, pero por lo cual no se iba a hacer problema, quien se sintió incomodo fue Massu que se retiro para acompañar a Tego.
-¿Qué le paso a Massu? –pregunto la chica a Koyama que estaba a su lado
-Keiko fue la chica de Yamapi y después se lanzo a los brazos de Massu –le murmuro el joven dejando mas clara la situación. En ese momento apareció Tego
-¿Quieres bailar Rayen? – la respuesta no se hiso esperar
-Claro me gustaría – el chico le ofreció su mano y ella acepto llevándola a la pista de baile, mientras bailaba se percato de que Keiko conversaba con Yamapi, pero de pronto se alejo de los chico para dirigirse al bar.
-No te preocupes por ella, eso esta en el pasado –le hablo Tego a la chica al percatarse de su mirada
-Lo siento,-se disculpo avergonzada de haber sido descubierta así que decidió divertirse aquella noche. Bailo con todos y cuando era el turno de Massu, Keiko se acerco a ellos colocándose entre el joven y ella.
-¿No crees que deberías soltarlos un poco? –Le sugirió dando a entender que se le habían pasado los tragos – ¿por qué no vuelves a tu país mejor y dejas de molestar a nuestros chicos?

Rayen se aguanto, pero todo tenía un limite
-Para empezar este es mi país y ellos son mis amigos no tendría porque dejarlos a no se que ellos me lo pidieran –dijo. Massu contemplaba la escena, pero previniendo lo que podía suceder tomo de un brazo a Keiko
-Sera mejor que te refresques un p–trato de sacarla, pero ella se le soltó en forma brusca
-Realmente eres una trepadora, ¡una zorra! –su voz iba subiendo de tono llamando la atención del resto que ya se estaban acercando para ver lo que sucedía. Jin y Kame se comenzaron a acercar al ver que eso iba tomando otro tono
-¡No tienes derecho a decir eso sin conocerme! – se defendió subiendo también el tono de su voz
-Claro que conozco a las de tu clase, les gusta meterse con uno y otro para poder ver con quien tienen mejor suerte –le grito acercándose mas a ella, Massu la trataba de sujetar, pero era inútil.
-Creo que se te han pasado las copas y ya estas hablando de mas, me retiro – se quiso alejar pero Keiko la dio vuelta levantando su mano para abofetearla, al ver aquello Kame se acerco mas para defender a Rayen, pero se detuvo. Una mano fuerte sujeto la de Keiko antes de que llegara a su destino.
-¡Ni siquiera te atrevas a tocarla! –la voz fuerte pero segura de Yamapi la asusto, al ver eso soltó la mano de la joven y se acerco a Rayen.
-No te entiendo Yamashita, defiendes a una occidental cuando decías que ni loco saldrías con una de ellas –arremetió al joven. Este paso su brazo por los hombros de Rayen.
-No lo niego, muchas veces dije eso, pero Rayen no había llegado a mi vida y lamento mucho haberlo dicho, pero una cosa es segura tu no te puedes comparar con ella – la humillo.
-¿Y quien es ella para ti? –siguió preguntando con rabia
-Ella…ella es mi novia, claro si acepta –lo dijo consiente de que todos observaban y espero una respuesta de Rayen que fue pillada de sorpresa.
-Yo acepto –dijo finalmente con una amplia sonrisa y lanzándose a los brazos del joven. Jin se acerco a Keiko y la tomo de un brazo sacándola del lugar.
-Disculpa amigo a sido mi culpa no debí traerla –dijo Jin al pasar al lado de Yamapi.
-No te preocupes, llévala a su casa para que se recupere.

En un rincón Kame como mero espectador observo y también salió del lugar no soportando la tristeza que le embargaba.

Los compañeros felicitaban a Yamapi, mientras Tego tomaba un micrófono invitando a todos a divertirse y a olvidar lo sucedido

-Acompáñame Massu y cantemos algo –invito a su compañero que inmediatamente tomo otro micrófono comenzando a cantar a dúo.
-Buena decisión Yamapi –le felicito Koyama- ya era hora para ti, pero recuerdas que tienes que hablar con Johnny-san para ver si da su autorización
-Si lo se y es algo que detesto, tener que dejar que ese hombre organice nuestra vida es ridículo.
-Te entiendo pero esta en nuestro contrato, lastima que éramos unos niños cuando firmamos y nunca pensamos en lo que podría suceder en nuestro futuro.

Dejaron de hablar al ver que Rayen se acercaba.

-Bailamos –sugirió él y la chica le entrego su mano para ser guiada hasta la pista.
-¿Eres feliz? –la pregunta sorprendió a la chica y no dudo en responder
-Si, mucho –Yamapi la tomo por la cintura atrayéndola hacia él para continuar bailando. Después del incidente ya olvidado con el anuncio de Yamapi todos se divertían, pero llegada una hora el joven decidió que ya debían retirarse así que despidiéndose salieron del local para abordar un taxi que los llevo esta vez hasta el departamento de él.
-¡Guau! Es hermoso y bastante grande –exclamo la joven al entrar.
-Antes lo compartía con Jin, y ahora lo ocupo cuando se que tengo trabajo temprano en la agencia. La mayor parte vivo con mi madre y mi hermana.
-Se nota que las quieres mucho…realmente eres un hombre tierno bajo esa coraza –el bajo la cabeza y al levantar su rostro ella pudo notar que se había sonrojado.
-¿Te has sonrojado?...lastima que no tengo mi cámara, tus fans se volverían locas al verte así
-No te rías, esto es culpa tuya, desde que apareciste ni yo mismo me reconozco –se acerco a ella y la tomo de forma seductora.
-¿Qué pretende Yamashita-sama?-pregunto con coquetería en su rostro
-Pretendo que esta noche sea especial…pretendo que la recuerdes por el resto de tu vida…como yo lo hare.

Comenzó a besarla con suavidad en los labios, acariciándolos, saboreando cada pliegue de ellos para luego entrar con su lengua y jugar dentro en forma sensual. Rayen recibía aquellas caricias suspirando y con sus manos comenzó a sacarle la chaqueta del traje, siguió con la corbata para desabrochar la camisa mientras el seguía besándola con pasión. La joven se separo de aquellos labios comenzando a besar el cuello masculino, dando suaves roces por el, causando que Yamapi lanzara cortos gemidos. Siguió besándolo, pero esta vez comenzó a bajar hasta aquel pecho endurecido por los ejercicios, lo besaba, lo lamia y acariciaba con sus manos, pero su meta era otra. Siguió bajando y con sus manos comenzó a quitar el obstáculo que se interponía. Desabrocho un poco el pantalón y bajo el cierre notando como un montículo duro se mostraba, con decisión lo saco de su prisión y comenzó a acariciarlo suavemente hacia arriba y hacia abajo, verse hacer esto y escuchar a Yamapi quejarse de placer comenzó a excitarla. Se arrodillo para poder seguir con mas soltura y ya sin reprimirse a lo que deseaba llevo el miembro erecto hasta su boca humedeciéndolo con su lengua, acariciándolo poco a poco hacia arriba hacia abajo ayudándose con su mano mientras con la otra terminaba de bajar el pantalón para acariciar las piernas, le gustaba hacerlo, le excitaba hacerlo.


Yamapi se sorprendió al verla como le comenzó a acariciar y cuando bajo hasta su miembro erecto y lo llevo hasta su boca pensó que acabaría en ese momento, era tan delicioso sentir su boca y su lengua como le acariciaban. Muy excitado la levanto por los hombros con suavidad, mientras se retiraba completamente la ropa que le sobraba.


-Quiero verte- pidió y soltando el cabello de ella comenzó a bajar los tirantes del vestido poco a poco disfrutando con lo iba descubriendo, la chica le miraba con deseo, el ya sabia lo que ella deseaba, pero tenían tiempo primero quería disfrutarla y que ella se sintiera complacida con lo que el hacia. Beso sus pechos y al vez les acariciaba con su mano, los lamia, le besaba el pezón cosa que a ella le fascino haciendo que gimiera, la volvió a besar dejando que el vestido corriera libremente por su cuerpo dejando solo un diminuto calzoncito a la vista, el la observo.


-Eres tan hermosa…y no puedo contener lo cuanto te deseo


Ya sin contenerse y con besos apasionados la llevo hasta la cama en donde la dejo con cuidado, le retiro lo único que la cubría y cubrió su cuerpo con el de él sin dejar de besarla. Rayen sintió como el miembro cada vez estaba mas duro y esta vez fue ella quien se coloco sobre él y con una sonrisa sensual comenzó a besarlo


-Te deseo Yamashita Tomohisa y esta vez quiero yo hacerte mío –con leves movimientos introdujo el miembro erecto en ella causando sorpresa en el joven que no se quedo atrás acariciando los pechos que se movían al compas de ella, Yamapi sentía el cabello acariciar su rostro cuando ella se acercaba para robarle un beso. Nunca había sentido tanto placer con otra mujer, pensó en aquel momento de pasión…Rayen era especial y era suya, solamente suya…su mujer. Se sentó sin retirarla causando una penetración mas profunda en la joven.


-Rayen, mírame – le pidió. La chica entre jadeos le miro con parte de su cabello cayendo por su rostro los que el retiro con ternura – esta noche no quiero poseerte ni que tú me poseas, quiero que seamos uno.


Ante aquella palabras Rayen emocionada lo abrazo acariciando su espalda. Se besaron, pero esta vez con pasión desenfrenada, moviéndose a un solo ritmo, arriba abajo cada vez mas rápido haciendo que sus cuerpos sudorosos resbalaran el uno en el otro hasta alcanzar lo que ambos deseaban , el placer máximo dejando parte de ambos en el otro. Cansados se dejaron caer sobre la sabana, Yamapi la acerco a él dejando que su cabeza descansara sobre su pecho aun agitado, se taparon y después de un ultimo beso se quedaron dormidos uno al lado del otro


A la mañana siguiente alguien entraba al departamento y lo recorría como buscando algo, al ver las prendas de ropa las recogió

-¿Y esto? –las tomo y las dejo en uno de los sillones para luego dirigirse hasta el dormitorio abriendo la puerta encontrando a Yamapi aun dormido en su cama y abrazado a él…una chica

-¡Tomohisa! – su nombre pronunciado tan fuertemente lo despertó al instante, se sentó en la cama mirando a la mujer que observaba desde la puerta.
-¡Okasan!


CAPITULO 9


Vergüenza, si esa era la palabra adecuada para lo que el pobre Yamapi estaba sintiendo al ver a su madre parada en la puerta, al igual que rayen que ocultando su cuerpo tras la sabana no quería ni mirar sólo sentía un gran calor en sus mejillas.


-Te espero en el living – fue lo que dijo y salió del cuarto mientras Yamapi se vestía rápidamente con unos pantalones y una polera.
-Tomo...-le llamo cuando él salía del cuarto. El chico volvió y la beso para luego tranquilizarla.
-No te preocupes, espera aquí –le pidió.

Cuando llego al living su madre salía de la cocina con una bandeja en la que había tres tazas

-Prepare un poco de té, deberías llevarle una taza a ella.

Yamapi se paro en frente de ella y bajo su cabeza con respeto
-Siento que hayas presenciado aquella escena okasan.
-No tienes que sentirlo ni disculparte ya eres bastante mayor para saber lo que haces y con quien lo haces –le dijo mientras tomaba unos sorbos de té.
-Ven siéntate –le pidió- veo que los rumores son ciertos, no sabia si creerlos o no.
-¿A qué te refieres? –pregunto tomando un poco del té.
-¿Acaso no lees? Hay muchos rumores en los que se te asocia a una joven occidental y con quien se te ha visto mucho –aclaro.
-En realidad no he tenido mucho tiempo para leer. Y sí es verdad ella se llama Rayen y es muy especial para mi.
-Ya veo, pero como madre no puedo dejar de preguntarte. ¿Si estará ella preparada para todo lo se te viene encima una vez que esto se sepa en la agencia?.
-Lo he estado pensando okasan y agradezco tu preocupación, pero ya es hora de que yo elija mi futuro.
-¿Te das cuenta de lo que dices?, Johnny- san no dejara tan fácilmente que tu tomes una decisión al respecto…además si el decide que sigas, ¿sólo tiraras todos estos años de esfuerzo?
-Creo okasan que esa será una decisión que yo tome –dijo firmemente, ya estaba cansado que todo lo decidieran por él –no quiero discutir, no ahora y menos con ella aquí –continuo.
-Como quieras –tomo su cartera y ya salía cuando se volvió –llévala algún día a la casa nos gustaría conocerla –dijo antes de salir.

Yamapi volvió a la pieza encontrando a la chica afirmada y mirando por la ventana apenas envuelta en la sabana. Se acerco a ella por detrás y la rodeo con sus brazos.

-Me parece que te estoy causando problemas –murmuro tristemente
-¿A qué te refieres? –le susurro al oído
-Lo lamento pero escuche lo que tu madre dijo…y en realidad nunca pensé que te causaría problemas con ella y con la agencia


El la dio vuelta con suavidad levantando el rostro de ella con su mano para que lo mirara

-Tu no eres un problema y nunca lo serias para mi y por la agencia no te preocupes ya era hora que comenzara a independizarme de las decisiones que toman por mi.

La abrazo haciendo sentirla bien

-Lo siento, por unos momentos me sentí insegura conmigo…no suelo ser así pero a veces hay cosas que me sobrepasan y…
-no digas mas...-la separo un poco de él- hoy es domingo y quiero pasar todo el día contigo dime lo que deseas y lo hare

Ella sonrió

-No me digas eso…son muchas las cosas que yo podría pedirte, pero pensándolo bien si no te molesta me gustaría ir a la playa, caminar y terminar el día con una sabroso plato de ramen.
-¿Nada mas? –Rió él- veo que no eres de las que le gusta gastar
-¿Y para qué ocupar dinero?, si hay tantas cosas que me hacen feliz y son gratis- dijo separándose de él para ir a la ducha.

Después de pasar por el departamento de la joven para cambiarse llegaron hasta la playa más cercana a la ciudad.

-Como amo el mar –sonrío diciendo Rayen mientras bajaba del auto y caminaba por la arena. Para estar en otoño el día era precioso con un sol brillante en la lejanía y un cielo azul…, Rayen se saco las zapatillas y subió sus pantalones hasta la rodilla
-Ven vamos te va a gustar –invito a Yamapi que la observaba con una amplia sonrisa al ver como la chica parecía una niña jugando con las olas, realmente le gustaba, realmente la amaba, pero ¿por qué le costaba decirlo?, ¿por qué no podía expresar aquellos profundos sentimientos en él?
-Idiota de mi -se dijo sacudiendo la cabeza como queriendo esfumar los pensamientos. Se saco los zapatos y también subió sus pantalones para unirse a Rayen que mojaba sus pies en el mar.
-Es reconfortante sentirse así –sonrío ella mientras le lanzaba un poco de agua a Yamapi que trato de agarrarla, pero ella fue mas ágil, corrió huyendo de él hasta que la alcanzo abrazándola y con sus fuertes brazos la levanto para depositarla en la arena.
-Me has atrapado –jadeo ella por la carrera- y ahora ¿qué harás? -pregunto con una mirada coqueta
-Sólo quiero mi recompensa –acerco sus labios a los de ella y primero los probo, luego acercando mas su cuerpo al de ella comenzó a besarlos con pasión.
-Tomo…espera…-le alejo un poco al ver de reojo como las personas que pasaban cerca murmuraban por el comportamiento de ellos
-¿Qué sucede? –Pregunto él, pero al ver hacia donde ella miraba comprendió- lo siento, estas avergonzada.
-Bueno…yo –comenzó a sonrojarse lo que no paso desapercibido para él sonriendo
-Realmente lo siento –se disculpo mientras la ayudaba a sentarse y quedar el uno junto al otro
-Tu jockey –se preocupo ella al ver que se le había caído, lo recogió y se lo coloco-creo que me pondría celosa si alguna fans te reconoce
-A veces me gustaría recorrer libremente las calles o los parques sin tener problema de ser reconocido, no te imaginas lo que hemos pasado como grupo con las fans –se explayo libremente como ya hace un tiempo lo hacia con ella.
-Y eso que aquí las fans son… ¿cómo se podría decir?…mas relajadas si fueras famosos en mi país creo que no te dejarían vivo –sonrío
-Creo que si –también sonrío, pero continuo –últimamente he comenzado a admirar la libertad que tienen los occidentales
-¿A qué te refieres? –pregunto ella
-Bueno ustedes expresan con más libertad sus sentimientos, son más de piel y aquí nos regimos por normas tan antiguas, no te discuto también las respeto, pero me gustaría un poco mas de lo que ustedes tienen.
-Sabes cuando llegue aquí, me costo acostumbrarme a no saludar con un beso, o a no dar la mano por ejemplo, pero a medida que les conocía comencé a respetarlos y se me hiso mas fácil la estadía aunque cuando te conocí decidí dejar atrás lo que había comenzado a respetar
-A mi me gusta como eres y me gusta cuando me tocas o me besas sin que tenga que haber un motivo –se acerco a ella juntando sus cabezas- me siento tan bien así…me relajo. Ojala cuando vuelva podamos hacer esto nuevamente
-¿Cuando vuelvas, te vas a algún lugar? –pregunto preocupada separándose de él
-Muy pronto tendremos la gira de fin de año y lamentablemente no nos veremos como ahora –le dijo mientras con su mano acariciaba la mejilla de Rayen.
-¿Y cuanto dura eso? –volvió a preguntar
-Poco mas de un mes, con el grupo vamos a varias ciudades…hey, pero no pongas esa cara, esto no es una despedida te pediría que me acompañaras, pero seria difícil que nos viéramos incluso allí, realmente no tendré tiempo
-¿Me llamaras?
-Todos los días –le prometió

Después de la playa y de aquella conversación que dejo a rayen preocupada Yamapi la llevo a un restauran…

-Este es el restauran de los padres de Koyama…mira allí esta él. ¡Koyama! –le llamo haciendo señas mientras se sentaban.
-Veo que estas aprovechando las últimas horas de libertad con tus padres
-Hey Yamapi, solo vamos de gira no es para tanto –le reprocho cuando se acerco a la mesa –así asustaras a Rayen…bueno que se van a servir
-Rayen desea probar el ramen que prepara tu madre
-No te va a decepcionar es el mejor de la ciudad –dijo con una amplia sonrisa- se los traigo enseguida
-Se nota que le gusta estar aquí -comento ella cuando lo vio alejarse- y cuando los veo como los trata a ustedes pienso que es como…
-Una madre –completo él- si es la okasan del grupo siempre esta pendiente de cada uno y sin que el lo sepa estamos agradecido de ello.

Después de que Koyama trajera los platos se sirvieron en calma y cuando terminaron se retiraron agradeciendo a la mama del joven en persona por el ramen.

En esta ocasión Yamapi manejo hasta el departamento de Rayen y al llegar a la puerta ella lo invito a pasar

-Por esta vez no pasare, mañana tengo que levantarme demasiado temprano.
-Entonces nos despedimos aquí
-¿Me esperarás? –pregunto el
-Sí- trato de sonreír, pero su corazón sentía pena, no quería separarse de él, un miedo muy grande a perderlo comenzó a rondar su cabeza, pero trato de no demostrarlo y cuando él la abrazo ella se aferro a Yamapi sintiendo el calor de su cuerpo
-Vamos no me voy para siempre –le sonrió cuando se separo- sólo espérame.

La beso, con ternura, con pasión rozando una y otra vez sus labios. Tampoco quería separarse de ella…maldito trabajo…pensó, realmente amaba a esa mujer. Lo quería decir pero sus labios callaron su confesión, ya habría tiempo cuando volviera.

Rayen lo vio subir a su auto y alejarse, de pronto sintió su mejilla húmeda y sonrió
-Tonta, el tiempo pasara volando.